La desconexión digital (y laboral) para evitar el agotamiento laboral

Leyendo el libro “El trabajo nos esta matando” del autor e investigador Jeffrey Pfeffer, publicado por la Editorial Fundipe, y con el estupendo prologo de mi admirada Nuria Chinchilla, me han venido a mis pensamientos algunas reflexiones sobre la Desconexión del trabajo que se ha denominado desconexión digital, aunque no consista solamente en alejarse de la tecnología para poder descansar y cargar energías.

En el libro se introducen algunos ejemplos a nivel mundial, en diferentes países y culturas, de personas que han fallecido por agotamiento laboral, es decir por estar trabajando intensamente durante mucho tiempo seguido.

El termino en Japón, que fue donde se documentó la primera muerte por esta causa, se denomina Karoshi, que significa muerte por exceso de trabajo.

En China, otro país conocido por sus largas jornadas de trabajo sin descanso ni vacaciones,  se denomina Guolaosi.

En la sociedad occidental también hemos tenido casos de muertes por exceso de trabajo o agobio laboral por no llegar a sacar el trabajo adelante. Siendo conocidos los casos en alguna entidad financiera británica o en una operadora de telefonía en Francia.

Cuando hablamos de Desconexión digital, concepto que se empezó a hablar no hace muchos años en Francia, hablamos de la necesidad que tienen las personas de poder descansar sin estar pendientes del trabajo después de finalizar su jornada laboral

Se trata de establecer una “Cultura de No obligatoriedad de trabajar” cuando la actividad laboral reglada haya terminado. Aunque se ha traducido en que no se tiene porque conectarse o contestar mails o wasaps después de la jornada laboral, y también incluye contestar llamadas telefónicas, aunque sean de tu Manager.

Las urgencias siempre son excepcionales y no deberían ser la norma en el trabajo. Si esto es asi, que la urgencia es lo habitual, entonces el trabajo esta mal dimensionada o es que existe una Cultura Toxica de trabajar el mayor numero de horas al dia.

Cualquier cosa que acontezca, excepto las urgencias muy localizadas, se pueden solucionar al dia siguiente. Siempre se puede contestar al “día siguiente” un mail, un mensaje, un wasap, que no suponga una situacion de “vida o muerte”, que como digo y defiendo suele ser algo excepcional.

Para lograr esto no solo la empresa debe defender la “Cultura de la Desconexión”, para que las personas no se agoten y puedan cometer errores, desvincularse o en ultimo termino abandonar la compañía. También las personas pueden acostumbrar a los responsables y Managers a no contestar de inmediato sus exigencias. Se trata de poder hacer una “Educación de los Managers” para que puedan adaptarse a un entorno de trabajo no basda en la respuesta inmediata.

La responsabilidad no solo debe caer en la empresa o en la Dirección de la compañía. Es clave establecer una normativa mucho mas detallada y valiente que la actual, que ponga unas “reglas del juego” para poder gestionar estas situaciones, muchas veces muy delicadas, que ponen el foco en la persona que decide desconectar con el riesgo de perder su puesto de trabajo o que tomen decisiones sobre su carrera profesional perjudiciales para la persona que ejerce ese derecho.

Se trata de afrontar, de una vez por todas, una situacion que realmente perjudica a personas y empresas. Ya que no desconectar tiene consecuencias fatales para los resultados de las compañías y para la salud de las personas.

Espero, y me propongo gestionar iniciativas, que pronto podamos consensuar una normativa completa y actualizada a los tiempos que vivimos de “Desconexión laboral” (por favor quiten lo de digital, los que no utilizan la tecnología también necesitan desconectar) para que podamos conseguir el bienestar de las personas y la mejora de resultados en las organizaciones.